A partir de los 50 años, las mujeres notan cambios sustanciales en su melena como la aparición masiva de canas, el debilitamiento del cabello, una caída de cabello mayor de lo habitual o la progresiva pérdida de densidad. El cabello tiene un ciclo de vida y su crecimiento, grosor y características van asociadas tanto a factores internos de su ciclo de vida como a factores externos. La edad es uno de los factores que pasan factura al cabello, y en las mujeres este cambio se puede empezar a notar a partir de los 50 años y se agrava tras la llegada de la menopausia.
La ralentización del metabolismo asociada a la edad se hace notar en el cuero cabelludo provocando una disminución de la microcirculación, debido en parte a que los capilares sanguíneos que sostienen la raíz del cabello también disminuyen. Por este motivo, llegan menos nutrientes al folículo piloso. El folículo piloso también sufre un proceso de envejecimiento, se vuelve más pequeño, y como recibe menos nutrientes, produce un cabello más fino, débil y en definitiva, de peor calidad. Un cabello frágil es además menos resistente a las agresiones externas, por lo que el simple hecho de peinarlo con cepillo, alisarlo o aplicarle calor, acelerará su envejecimiento, provocará que se rompa o bien que se desprenda más fácilmente de la raíz, acelerando la caída del cabello.
Cómo reconocer la pérdida de densidad
Es importante aprender a identificar los síntomas que provoca la pérdida del cabello por debilitamiento, rotura o caída. Si se detecta a tiempo, la mayoría de causas relacionadas con la pérdida de densidad se pueden frenar o tratar, recuperando así un cabello sano y resistente. Estos síntomas son:
- Picor o incomodidad en el cuero cabelludo, que se nota má seco y pierde la elasticidad.
- Alteración de la producción de grasa: puede ocurrir que se genere más sebo o bien que disminuya.
- Aparece la descamación o episodios de caspa.
- Cabello más fino, ha perdido grosor y también se nota en el brillo.
- Primeros síntomas de caída, con más cabellos de lo habitual en la ducha, al peinarse o en la almohada.
- Cabello quebradizo, se rompe con facilidad al peinarlo o tocarlo.
- Al recoger el cabello en una cola, ésta se nota más delgada.
- Aparecen zonas de la frente con más entradas, o zonas donde la piel se deja ver cuando antes no era así.
Diferenciar un proceso de pérdida capilar temporal de uno permanente
Al sufrir una caída del cabello temporal, los síntomas se precipitan rápidamente y se pierde gran cantidad de cabello en poco tiempo. Sin embargo, cuando el proceso es temporal, el cabello perdido se recupera progresivamente entre tres y seis meses después, ya que el folículo piloso no ha quedado dañado y puede seguir produciendo cabello nuevo. Las causas más habituales de la pérdida temporal de cabello suelen ser alteraciones hormonales por embarazo, una menor producción de hormona tiroidea, estrés o situaciones derivadas de problemas de salud y sus tratamientos: por proceso oncológico, diabetes, enfermedades autoinmunes, ciertos medicamentos… incluso una alimentación deficiente o el estrés pueden desencadenar periodos de mayor caída capilar. A estos factores se les suele añadir como comentábamos el hecho de que el cabello, al estar debilitado, es más vulnerable y se rompe con más facilidad. Para revertir el proceso de caída del cabello temporal, se debe actuar en dos frentes: sobre la causa que la está provocando y reforzando el cabello y el cuero cabelludo con cosmética o terapias para acelerar el proceso de regeneración capilar y que el nuevo cabello salga fuerte y sano.
La caída del cabello permanente se da de forma más progresiva, pero el cabello que ha caído no se puede recuperar ya que el folículo piloso ha dejado de funcionar y se ha cerrado. La causa en este caso suele ser la edad, junto a factores genéticos y hormonales, y el tratamiento se enfoca en frenar la situación y mejorar la calidad del cabello y de los foliculos pilosos que siguen activos con cosméticos, tratamientos orales o clínicos. Además, para recuperar densidad capilar se puede acudir a injertos o trasplantes, siempre de mano de profesionales. Antes de que esto ocurra, prevenir la caída del cabello por debilitamiento del folículo piloso pasa a ser una prioridad en mujeres que noten síntomas de caída o estén cerca de la etapa menopáusica.
Cómo tratar el cabello maduro y evitar la caída y la debilidad
Cumplir años no está reñido con llevar el cabello largo y mantenerlo fuerte y brillante. Cuidar del cabello trabajando los signos de debilitamiento es el objetivo de la línea NaturVital Anticaída Anti-Rotura, creada para combatir las dos disfunciones que provocan pérdida de densidad capilar: la caída del cabello y la rotura provocada por un cabello frágil.
La línea Anticaída Anti-Rotura es una completa rutina reparadora de tres productos pensados para el día de lavado. Se formula con Proteínas de Trigo hidrolizadas para reparar la fibra capilar y Ginseng para revitalizar el cabello.
– Champú: Limpia suavemente el cuero cabelludo y el cabello mientras aporta nutrientes para fortificar el cabello.
– Acondicionador: Aporta vitaminas A, B5, E, F, H y Pro-vitamina B5. Sella la fibra capilar y protege el cabello, aumentando su suavidad y elasticidad.
– Mascarilla: De uso como mínimo una vez a la semana, proporciona proteínas, vitaminas y nutrientes al cabello. Repara el cabello desde la raíz hasta las puntas.
Se recomienda usar en cabello maduro para fortalecerlo, y su uso continuado deja el cabello brillante, fuerte y resistente frente a la caída y a las agresiones externas. Además, también es un cuidado adecuado para cabello largo, tratado químicamente con alisado, moldeado o tinte, o que se peina con calor de plancha o secador, ya que este tipo de melena también sufre síntomas de debilitamiento.
El cuidado Anticaída Anti-Rotura de NaturVital se basa en la eficacia de activos vegetales como el Ginseng, las Proteínas de Trigo hidrolizadas y las semillas de Trigo y Soja. Es una línea sin ingredientes de origen animal, apta para veganos, que se presenta en envases sostenibles de PET 100% reciclado y reciclable, evitando el uso de plástico virgen para promover la reutilización de recursos y la economía circular.
Además de usar la línea Anticaída Anti-Rotura, otras estrategias para recuperar densidad en el cabello y rejuvenecer la melena son:
– Un buen corte a capas que aporte volumen, elimine las puntas abiertas y dé movimiento al cabello.
– Revisar el aporte de minerales y vitaminas de nuestra alimentación, y seguir un estilo de vida activo que incorpore ejercicio físico. El ejercicio activa la circulación, mejora la oxigenación de los tejidos, equilibra el balance hormonal y previene la pérdida de masa muscular que es un signo de envejecimiento.
– Si los síntomas de caída se intensifican, empezar a usar un producto de tratamiento de choque, como el sérum Anticaída de NaturVital.
– Consultar con un tricólogo o dermatólogo cualquier alteración del cuero cabelludo y del cabello, ya que un diagnóstico temprano es clave para recuperar densidad capilar de forma más rápida y eficaz.
2 comentarios
Como lo puedo comprar pues vivo en Inglaterra?
En Gran Bretaña puedes encontrar nuestros productos en Boots, o comprar a través de la web de nuestro distribuidor allí: http://www.naturvital.co.uk/